Las historias de superación personal suelen ser bastante atractivas para el público en general, tanto más si con la excusa de denunciar determinadas realidades su contenido ofrece el suficiente morbo para hacer mas atractiva su historia. Es por ello que tras terminar de ver "Precious" no me costó mucho entender los motivos por los cuales a tanta gente le gustó esta película de caracter independiente y el por qué del aluvión de premios que ha recibido -inlcuidos dos Oscars- dándole una envergadura como denuncia social que a mi modesto entender, no tiene.
"Precious" es de esos productos fílmicos que periódicamente aparecen para generar la polémica y el lagrimón fácil recurriendo para ambas cosas al golpe bajo la mayoría de las veces. No encuentro otra manera de comprender la sucesión enormemente exagerada de desgracias que debe padecer la protagonista durante las casi dos horas que dura la película. Y conste que no soy de los ingenuos que prefieren negar que a muchas personas en el mundo les deban suceder cosas iguales o parecidas, pero el problema es que el guión -adaptado de la novela de Ramona "Sapphire" Lofton, "Push"- luce en su plasmación a imagenes tan forzado que termina resultando inverosímil, a veces al punto de lo avergonzante y otras de lo hilarante.
La búsqueda de una luz al final de ese túnel oscuro que es la vida de la desgraciada protagonista es artificiosamente estirada en pos de engrosar la mayor cantidad de calamidades posibles que piquen la sensibilidad del espectador más desprevenido. Y digo de los más desprevenidos porque aquellos que sean habituales a los dramones fílmicos televisivos de la HBO y similares, probablemente verán todo lo malo que le puede suceder a un ser humano en 6 o 7 telefilmes baratos compendiado aquí en solo dos horas de metraje.
Lee Daniels peca de excesiva pretensiosidad al tratar de resumir ese larguísimo catálogo de crudezas mezclandolo al mismo tiempo con secuencias de puro escapismo que por momentos bordean lo ridículo -los sueños de éxito de Precious, cantando y bailando junto a su príncipe blanco, siendo adorada por miles de personas que piden su autógrafo- junto a otras que presentan con trazo demasiado grueso a diversos estereotipos de sociedad marginada -las compañeras de clase de Precious, un grupo tan variopinto como casi caricatural- para terminar con otros personajes que son la representación física de que siempre hay salida más allá de los condicionamientos sociales -la profesora lesbiana y el enfermero negro interpretado por Lenny Kravitz-.
Da la sensación que Daniels pierde la brújula de lo que está dirigiendo varias veces durante el relato no terminando de decidir si es más importante la cruel historia de su protagonista o la denuncia de las carencias de un sistema social incompetente y de una sociedad marginizadora. Como quiera que sea, el resultado final de "Precious" no es mejor que el podrían tener los ya mencionados filmes dramáticos televisivos que se emiten por cable diariamente a casi todas horas, y que de no ser por el apadrinamiento económico y publicitario de Ophra Winfrey, ícono mediático del afronorteamericanismo actual, la película hubiese pasado sin pena ni gloria.
En el apartado de las actuaciones, me sorprendieron algunas como la de Mariah Carey, casi irreconocible bajo ese pelucón negro que le tocó en suerte, interpretando a una no muy convicente asistente social o la interpretación de Mo´Nique como la desquiciada madre de Precious, una actuación poderosa pero dudosamente merecedora del premio de la Academia que se llevó.
La actuación protagónica de Gaborey Sidibe digamos que es funcional. Su personalidad apática y sus gestos poco expresivos supongo que cierran con el estado de infelicidad perpetua en el que vive, pero para mi gusto fueron factores limitantes como para que me sintiera mínimamente sensibilizado con ella y su situación.
Resumiendo; "Precious" es un film hiperdimensionado en todo sentido, que abusa de la explotación del morbo para ganarse un público que lo defenderá bajo el pretexto de ver una realidad que nos podría haber tocado a todos. Eso si, sin la más mínima intención de imaginarse en tal situación sino de simplemente presenciarla como espectador para satisfacer su propio morbo tal como si de una comida de consumo rápido se tratase. Buena parte de la crítica también tiene su cuota de responsabilidad en ese sobredimensionamiento que lo ha hecho ver como un gran producto independiente cuando en realidad utiliza los peores recursos del cine mainstream para venderse.
Puntaje: 4/10
A mi la pelicula me gustó, es muy shoqueante pero todo lo que hace refleccionar esta muy bueno,para recuperar valores como sociedad.,además que tiene el aprendizaje de valor y fortaleza en la vida. Los recursos que critica, cuando preciosa sueña no es mas que la ilusa adolescente que vive su realidad pero todavia no termina de aceptarla.
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