Continuación directa de "Casino Royale" esta nueva aventura de James Bond sigue siendo tan heredera del estilo de la saga de Jason Bourne como la anterior. No es algo que me moleste particularmente y supongo que tampoco a la mayoría del público que parece haber aceptado con beneplácito este cambio, dejando en claro que la estilización refinada y por momentos hasta caricaturezca del personaje que muchos preferían hasta el retiro de Pierce Brosnan ya es cosa del pasado. En esta ocasión Bond intenta aclarar los motivos de la traición y muerte de Vesper, su amada asesinada en el film anterior, lo que lo lleva a descubrir una organización internacional que intenta apoderarse de los recursos naturales de los paises tercermundistas -Bolivia en este caso- para luego lucrar con ellos a su antojo. El enorme poder de dicha organización queda demostrado tras el intento de asesinato de M frente a las narices del propio Bond.
La trama es algo más compleja que en la película anterior -y bastante más dialogada también- y ha perdido algo de ese exquisito suspenso que pudimos ver en aquel juego de cartas y traiciones que convirtió a la anterior entrega en algo bastante distinto dentro de lo que venía siendo la saga.
De todas formas, Daniel Craig con su ya patentada frialdad, ofrece la cantidad suficiente de tiros, mamporros y sangre como para evitar que el espectador olvide que lo que está viendo es un film de acción. Buena acción sin dudas, pero que no logra hacerte olvidar que la entrega anterior era mejor.
En definitiva, es una buena continuación que sin estar al nivel de su antecesora tampoco defrauda.
Puntaje: 6/10
PD: Llamativamente buena y bien colocada la secuencia homenaje a la mítica "Goldfinger".
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