viernes, 27 de febrero de 2009

THX 1138: La ciencia ficción crítica de George Lucas

Mucho antes de que el público viera aparecer en una pantalla de cine el ya emblemático logo del popular sistema de sonido THX, esas tres letras fueron parte del título de una película que, probablemente, sea más recordada por los amantes del cine de ficción científica que por cualquier otro público.
"THX 1138", tal es el título que George Lucas -padre de la saga "Star Wars"- dió a su ópera prima cinematográfica, en la que plasma muchas de las ideas sobre el futuro tecnológico y social de la humanidad que pasaban por su cabeza en ese momento. La película se estrenó sin mucho éxito de público en 1971, tras dos años de rodaje y post producción. Apadrinado económicamente por el mítico Francis Ford Coppola, Lucas se basó en un cortometraje experimental que el mismo realizara durante sus estudios de cinematografía un par de años antes titulado "Electronic Laberynth THX 1138:4EB".

La película discurre en un futuro bastante lejano -o no, según como se mire- donde la humanidad vive en ciudades subterráneas donde absolutamente todo está electrónicamente controlado; desde abrir el botiquín de su cuarto de baño hasta la eficiencia individual de cada sujeto en sus labores diarias. Una mañana, el protagonista, THX 1138 (interpretado por un joven Robert Duvall) descubre que algo no está bien con él. Sus sentimientos encontrados y alterados por tanto control y manipulación lo llevan a cometer una serie de graves errores por los que es juzgado y condenado a ser recluido por las autoridades, las que intentarán "re-convertirlo" en un elemento más de esa sociedad de sujetos cuyos nombres y apellidos no son más que números y letras. Pero THX logrará escapar de su cautiverio e intentará llegar a los límites de esa ciudad bajo tierra para finalmente salir de ella y enfrentar un destino que, él supone, no puede ser peor.

Los paralelismos de este argumento con varias novelas distópicas clásicas como "1984" de Orwell o "Un mundo feliz" de Huxley, no son mera coincidencia. Lucas mamó buena parte de su inspiración para el film en obras literarias como estas, donde los protagonistas intentan escapar de la "perfección" consumista y controladora de sociedades que han hecho de la tecnología una herramienta para el control de masas.
Lucas aprovechó con su relato para disparar sus tiros críticos sobre la sociedad de consumo actual, sobre el uso de los medios masivos de comunicación y de la religión para el dominio de las personas y sobre el capitalismo desmedido, todo ello acompañado de toda la imaginería visual que pudo o que su acotado presupuesto le permitió. Buena parte del valor de este largo se basa en ese sentido crítico que Lucas le imprimió y que era muy válido en su época, fundamentalmente porque quien lo realizó aún no se había convertido en el potentado hollywoodense en el que años más tarde se convertiría. Irónicamente, eso es lo que hace más curioso y contradictorio este producto; que justamente George Lucas, un hombre que ha forjado un imperio comercial y económico gracias básicamente a un puñado de películas de género, critique al sistema que le permitió hacerlo con una vehemencia que, hoy en día, parece ajena a él.

Si bien el correr del tiempo ha hecho que el futurismo presentado en sus imagenes al igual que su mensaje anti-consumista se resienta un poco -esto último, más por acción de su creador que por otra cosa- no se pueden negar sus valores desde lo exclusivamente cinematográfico. La estética del film resulta ser lo más logrado del conjunto, por más que muchos de sus elementos tecnológicos aparezcan hoy en día como desactualizados. La representación de esa ciudad subterránea, con sus autopistas congestionadas de "modernos" vehículos de aspecto vanguardista o con sus guardias robóticos de rotros acerados controlando que sus ciudadanos no se rebelen contra el orden establecido, resulta bastante llamativa, especialmente en la media hora final lapso en el que se produce la huída del protagonista y gracias a la cual podemos ver muchas de las locaciones de esa ciudad futurista.
El ritmo pausado en el que se desarrolla buena parte de la historia así como la ausencia casi total de secuencias de acción hacen de "THX 1138" un film más apto para el consumidor de ciencia ficción más purista y sin pretensiones adrenalínicas. Es casi como ver una pieza de museo única, en el sentido que fue la primera obra de un hombre que cambiaría el concepto de este género pocos años después gracias a una forma de hacer cine que, irónicamente, es diametralmente opuesta al espíritu de su ópera prima.

martes, 24 de febrero de 2009

Crítica: "El Luchador" (The Wrestler) de Darren Aronofsky

Randy "The Ram" Robinson, un luchador de wrestling americano, auténtica estrella de ese deporte durante los años 80, es para todos un buen tipo. Pero pocos saben su realidad fuera del cuadrilátero. Sus años de gloria se han terminado. Apenas puede sobrevivir con lo que gana peleando en sitios de segunda y hasta de tercera categoría, haciendo trabajos rutinarios en supermercados o vendiendo su autógrafo por unos pocos dólares. Pero los años comienzan a pasarle factura y tras un ataque cardíaco decide intentar volver a empezar, alejándose del mundo de la lucha libre y tratando de acercarse a una hija que olvidó hace años.

El retorno a la dirección de Aronofsky es una película bastante distinta hasta lo que ahora nos había mostrado, alejada de la estética de a ratos videoclipera de "Requiem por un sueño" (2000) o de la seudoprofundidad espiritualoide de "The Fountain" (2006). Por el contrario, "El Luchador" es un relato bastante más intimista y real, filmado con un estética que bordea lo documental, a tal punto que buena parte del relato se muestra desde la perspectiva del protagonista, con la cámara detrás de su espalda.

Pero la película está lejos de ser un documental sobre el wrestling. Nada de eso. El mostrar al mundo de la lucha en el que se mueve el protagonista es casi una excusa para mostrar los motivos por los cuales es un perdedor que ha hecho de la derrota fuera del ring su forma de vivir. El trabajo de Rourke para transmitir esa vida de derrota es realmente encomiable y es fácil intuir que su pasado pugilistisco le ha venido como anillo al dedo para interpretar este papel. Rourke, nos da una muestra de su buen estado físico -más allá de sus evidentes cirugías faciales- al interpretar sin necesidad de dobles cada pelea que vemos a lo largo del metraje, dando golpes, saltos y caidas por doquier. Su impronta personal es la que hace que el espectador mantenga el interés en el relato casi todo el tiempo.
Sin embargo, al decir "casi", quiero decir que en algunos breves tramos la historia decae. Y esos tramos tienen que ver más que nada con la aparición de Evan Rachel Wood, interpretando a la hija de Randy. Su actuación, sin ser mala, parece accesoria y solo cumple la función de querer remarcar la actitud de cambio del protagonista. Desde lo argumental, resulta poco creíble que tras 15 años de abandono y tras un odio tan visible hacia su progenitor el personaje de Wood cambie tan radicalmente y en tan poco tiempo a una actitud abierta hacia él.
En lo personal, hubiese preferido una profundización en su relación con Cassidy (interpretada estupendamente por Marisa Tomei) una veterana stripper y antiguo amor de Randy, que comparte con él ese sentimiento de que su tren ha pasado, aunque no quiera admitirlo.

Con todo, y mas allá de altibajos, "El Luchador" es un film de muchas e interesantes facetas. Es una historia sobre la imposibilidad de querer cambiar lo que se es, de aceptar que la vida nos da a veces oportunidades que somos incapaces de ver o tomar, de que los años no vienen solos y que la felicidad son apenas breves momentos intercalados entre muchos malos.
El final, como suele ser marca de fábrica del director, es totalmente abrupto y abierto, dejándole al espectador la posibilidad de decidir si el protagonista ha tomado la decisión correcta o no.

El conjunto puede parecer tópico y hasta le haga sentir a más de uno que está frente a una visión menos comercial del "Rocky" de Stallone, pero el resultado final es bien distinto y merece la pena ser visto.
En resumen, un estupendo regreso para Aronofsky y uno no menos bueno para Rourke. Ojalá que ambos sepan sacarle provecho a este regreso con gloria.

Puntaje: 6/10

lunes, 23 de febrero de 2009

Los ganadores del Oscar 2009

Casi 3 horas y media de show nos permitieron confirmar que las predicciones no estaban tan lejos de la realidad. "Slumdog Milonaire" o "¿Quien quiere ser millonario?" de Danny Boyle terminó siendo la gran triunfadora de la noche, llevándose 8 estatuillas compartidas entre rubros artísticos y técnicos.
La gran derrotada -con total justicia para quien escribe- fue "El curioso caso de Benjamin Button" que de 13 nominaciones solo ganó 3 y exclusivamente en rubros técnicos, incluyendo mejores efectos visuales -premio con el que discrepo; "The dark knight" o"Ironman" hubiesen sido elecciones mucho más justas-.
Los demás premios eran también bastante cantados, especialmente Sean Penn como mejor actor y la Winslet como mejor actriz. Especialmente emotivo -y cantado también- el premio al fallecido Heath Ledger, segundo Oscar póstumo en la historia de los premios de la Academia.
El otro gran derrotado, Mickey Rourke, de buena labor en "El Luchador", deberá conformarse con la nominación que recibió, bastante consuelo para alguien que hasta hace pocos años estaba artísticamente muerto.

Entre lo más flaco que puedo decir del espectáculo, debo mencionar la presentación de las canciones nominadas; sin animos de ofender a nadie, creo que bastante pobres todas e igual de pobres las puestas en escena de las mismas. La compuesta por Peter Gabriel para "Wall-E" tampoco fue nada del otro mundo y, para colmo, el cantante se negó a subir al escenario a interpretarla atribuyendo su negativa al corto tiempo que se le ofreció para hacerlo -tan solo 1 minuto-.

Finalmente, solo decir que la entrega fue una de las más dinámicas que se recuerde, con un Hugh "Wolverine" Jackman estupendo, que volvió a demostrar su enorme categoría no solo como actor, sino también como presentador y cantante.

Aqui les dejo la lista de premiados.

Mejor Actriz Secundaria: Penélope Cruz por “Vicky Cristina Barcelona”
Mejor Guión Original: Dustin Lance Negro por “Milk”
Mejor Guión Adaptado: Simon Beaufoy por el Guion de “Slumdog Millionaire”
Mejor Pelicula de Animación: “WALL-E” (Disney - PIXAR).
Mejor Cortometraje de Animación: “La Maison en Petits Cubes” Una producción de Robot Communications Production, Kunio Kato.
Mejor Direccion Artistica: “The Curious Case of Benjamin Button”, El Curioso Caso de Benjamin Button.
Mejor Vestuario: “The Duchess” , Michael O’Connor.
Mejor Maquillaje: “The Curious Case of Benjamin Button” , Greg Cannom.
Mejor Fotografia: Anthony Dod Mantle por “Slumdog Millionaire”
Mejor Cortometraje: Jochen Alexander Freydank por “Spielzeugland (Toyland)”
Mejor Actor de Reparto: Heath Ledger por “The Dark Knight”
Mejor Documental: James Marsh and Simon Chinn por “Man on Wire”
Mejor Corto Documental: “Smile Pinki” por Megan Mylan. A Principe Production.
Mejores Efectos Visuales: “The Curious Case of Benjamin Button” Eric Barba, Steve Preeg, Burt Dalton and Craig Barron.
Mejor Edicion de Sonido: Richard King por “The Dark Knight"
Mejor Mezcla de Sonido: Ian Tapp, Richard Pryke and Resul Pookuttypor “Slumdog Millionaire”
Mejor Montaje: Chris Dicken por “Slumdog Millionaire”
Mejor Musica Original: A.R. Rahman por “Slumdog Millionaire”
Mejor Cancion Original: “Jai Ho” de “Slumdog Millionaire” música por A.R. Rahman, Lyric by Gulzar.
Mejor Pelicula Extranjera: “Departures”, Japón.
Mejor Director: Danny Boyle por “Slumdog Millionaire”
Mejor Actriz: Kate Winslet por “The Reader”

sábado, 21 de febrero de 2009

A 24 horas de la entrega de los Oscars

No está de más hacer un repaso de las producciones y personalidades que están compitiendo por la codiciada estatuilla. Lamentablemente, y como suele suceder en mi país y, hasta lo que se, en casi toda esta región del mundo, muchas de las producciones de la lista aún no tienen siquiera fecha de estreno por estos lares.

-Mejor Película: “The Curious Case of Benjamin Button,” ”Frost/Nixon,” ”Milk,” ”The Reader,”Slumdog Millionaire.”
-Mejor Actor: Richard Jenkins, “The Visitor”; Frank Langella, “Frost/Nixon”; Sean Penn, “Milk”; Brad Pitt, “The Curious Case of Benjamin Button”; Mickey Rourke, “The Wrestler.”
-Mejor Actriz: Anne Hathaway, “Rachel Getting Married”; Angelina Jolie, “Changeling”; Melissa Leo, “Frozen River”; Meryl Streep, “Doubt”; Kate Winslet, “The Reader.”
-Mejor Actor de Reparto: Josh Brolin, “Milk”; Robert Downey Jr., “Tropic Thunder”; Philip Seymour Hoffman, “Doubt”; Heath Ledger, “The Dark Knight”; Michael Shannon, “Revolutionary Road.”
-Mejor Actriz de Reparto: Amy Adams, “Doubt”; Penelope Cruz, “Vicky Cristina Barcelona”; Viola Davis, “Doubt”; Taraji P. Henson, “The Curious Case of Benjamin Button”; Marisa Tomei, “The Wrestler.”
-Mejor Director: David Fincher, “The Curious Case of Benjamin Button”; Ron Howard, “Frost/Nixon”; Gus Van Sant, “Milk”; Stephen Daldry, “The Reader”; Danny Boyle, “Slumdog Millionaire.”
-Mejor Película Extranjera: “The Baader Meinhof Complex,” Alemania; “The Class,” Francia; “Departures,” Japón; “Revanche,” Austria; “Waltz With Bashir,” Israel.
-Mejor guión adaptado: Eric Roth y Robin Swicord, “The Curious Case of Benjamin Button”; John Patrick Shanley, “Doubt”; Peter Morgan, “Frost/Nixon”; David Hare, “The Reader”; Simon Beaufoy, “Slumdog Millionaire.”
-Mejor guión original: Courtney Hunt, “Frozen River”; Mike Leigh, “Happy-Go-Lucky”; Martin McDonagh, “In Bruges”; Dustin Lance Black, “Milk”; Andrew Stanton, Jim Reardon y Pete Docter, “WALL-E.”
-Mejor película animada: “Bolt”; “Kung Fu Panda”; “WALL-E.”
-Mejor Dirección de Arte: “Changeling,” ”The Curious Case of Benjamin Button,” ”The Dark Knight,” ”The Duchess,” ”Revolutionary Road.”
-Mejor Fotografía: “Changeling,” ”The Curious Case of Benjamin Button,” ”The Dark Knight,” ”The Reader,” ”Slumdog Millionaire.”
-Mejor Mezcla de Sonido: “The Curious Case of Benjamin Button,” ”The Dark Knight,” ”Slumdog Millionaire,” ”WALL-E,” ”Wanted.”
-Mejor Edición de Sonido: “The Dark Knight,” ”Iron Man,” ”Slumdog Millionaire,” ”WALL-E,” ”Wanted.”
-Mejor música original: “The Curious Case of Benjamin Button,” Alexandre Desplat; “Defiance,” James Newton Howard; “Milk,” Danny Elfman; “Slumdog Millionaire,” A.R. Rahman; “WALL-E,” Thomas Newman.
-Mejor canción: “Down to Earth” de “WALL-E,” Peter Gabriel y Thomas Newman; “Jai Ho” de “Slumdog Millionaire,” A.R. Rahman y Gulzar; “O Saya” de “Slumdog Millionaire,” A.R. Rahman y Maya Arulpragasam.
-Mejor Vestuario: “Australia,” ”The Curious Case of Benjamin Button,” ”The Duchess,” ”Milk,” ”Revolutionary Road.”
-Mejor Largometraje Documental: “The Betrayal (Nerakhoon),” ”Encounters at the End of the World,” ”The Garden,” ”Man on Wire,” ”Trouble the Water.”
-Mejor Cortometraje Documental: “The Conscience of Nhem En,” ”The Final Inch,” ”Smile Pinki,” ”The Witness - From the Balcony of Room 306.”
-Mejor Edición: “The Curious Case of Benjamin Button,” ”The Dark Knight,” ”Frost/Nixon,” ”Milk,” ”Slumdog Millionaire.”
-Mejor Maquillaje: “The Curious Case of Benjamin Button,” ”The Dark Knight,” ”Hellboy II: The Golden Army.”
-Mejor Cortometraje Animado: “La Maison en Petits Cubes,” ”Lavatory - Lovestory,” ”Oktapodi,” ”Presto,” ”This Way Up.”
-Mejor Cortometraje: “Auf der Strecke (On the Line),” ”Manon on the Asphalt,” ”New Boy,” ”The Pig,” ”Spielzeugland (Toyland).”
-Mejores Efectos Visuales: “The Curious Case of Benjamin Button,” ”The Dark Knight,” ”Iron Man.”

martes, 17 de febrero de 2009

Crítica: "Pesadilla en el piso 27" (Steel Trap) de Luis Camara.

Reseña: Grupo de treintañeros acepta la invitación de un desconocido a una fiesta en un desolado edificio y todos comienzan a ser ejecutados por un extraño enmascarado cuyas motivaciones son desconocidas.

Si el leer esta breve sipnosis le generó al lector una fuerte sensación de deja vu acompañada de un no menos fuerte olor a ideas rancias, no es mera casualidad. La enésima utilización de los clichés más gastados de la historia del cine de terror, toma forma en este mamotreto que bebe de mil fuentes pero no termina decidiendose por ninguna.

Producción de origen alemán, pero cuya historia se desarrolla en Los Angeles -anotación locativa ridícula por que no afecta en absoluto el resultado final- es una muestra más de lo mal que viene el cine de corte terrorifico en los últimos años.

El semi desconocido Luis Camara, especialista en cortometrajes y perpetrador también del guión, nos muestra durante hora y media a un grupete de estereotipos, yendo y viniendo por los pasillos oscuros de un edificio, llenando los espacios muertos con dialogos que suenan a puro relleno y plagiando de pasada alguna que otra idea de películas como "El juego del miedo" (Saw) o "Martes 13". Entre tanta cosa, Camara se olvida de lo principal; de producir miedo, sentimiento ausente durante casi toda la pelicula.
Lo que no está ausente es el aburrimiento. Aburrimiento generado por tantas idas y venidas de un guión que , daría la impresión, fue escrito a las corridas y modificado por falta de ideas durante el proceso de filmación. El resultado es un film absolutamente prescindible, con un final tan forzado en querer generar una vuelta de tuerca que sorprenda al espectador que termina siendo tan insulso como increible.
En resumen; evadan este desastre fílmico como sea o preparense a dormir una buena siesta.
Puntaje: 2/10

lunes, 16 de febrero de 2009

Crítica: "Milk" de Gus Van Sant

Gus Van Sant vuelve al ruedo de lo biográfico con la historia de Harvey Milk, homosexual declarado y precursor de la lucha por los derechos gays en los Estados Unidos durante la década del 70. En realidad, la película muestra solo sus últimos ocho años de vida -de 1970 a 1978- período que fue en el que realmente se abocó a la lucha de derechos civiles de las personas con su misma orientación sexual al comienzo y luego por el de todas las minorías, de San Francisco primero y del resto de su país después.

No es la primera vez que Van Sant aborda temas relacionados con la homosexualidad. Ya lo había hecho al comienzo de su carrera con "Mala Noche" (1985) y años después con "Mi mundo privado" (1991) aunque en ambos casos desde aspectos estrictamente ficcionales y obedeciendo a una tendencia contracultural típica en su filmografía anterior a su entrada a Hollywood.

En "Milk", Van Sant mezcla elementos documentales de la época como entrevistas televisivas y filmaciones en blanco y negro -especialmente punzantes las usadas en los títulos de apertura, mostrando a la policía entrando a la fuerza y a golpe de bastones a centros nocturnos "encubiertos" donde ciudadanos gays se reunían- con otros de ficción basados en las grabaciones de audio que el mismo Milk realizó en secreto y que dejó como legado en caso de que alguna de las muchísimas amenazas de muerte que recibía llegara a concretarse. De hecho, así comienza el film, con el protagonista narrando a una grabadora sus vivencias de los últimos años hasta ser elegido por votación popular, como el primer concejal de San Francisco abiertamente homosexual y cuya actitud por la causa hizo que miles de gays norteamericanos se decidieran a salir del closet revelando su verdadera orientación.

Muy bien filmada y ágilmente narrada, la gran fuerza de "Milk" se centra en el hecho de ser un producto de militancia abiertamente política así como también un testimonial con la forma del típico cine mainstream hollywoodense. Posiblemente se deban a ello las 8 nominaciones al Oscar que ha recibido y de las cuales creo que la de Sean Penn como mejor actor es la más merecida.
Otros miembros del reparto como Emile Hirsch -irreconocible por momentos a tal punto que parece mentira que hace tan solo un año protagonizara el "Meteoro" de los Wachowski-, James Franco o el mismísimo Josh Brolin -de gran parecido físico al verdadero Dan White, concejal opositor a Milk y a la postre, su asesino- ayudan con sus actuaciones a crear un film aún más sólido.
No faltará quien se moleste con la minuciosidad con que por momentos Van Sant plasma la condición sexual del protagonista, de su pareja o de quienes le rodean, pero nada de lo que muestra -ni como lo muestra- está más allá de lo que se puede ver en otros films de temática homosexual como "Brokeback Mountain" (2005) de Ang Lee o similares.

No puedo decir que se trate de la mejor película de Van Sant (creo que lo mejor del director anda entre "Todo por un sueño"(1996) y la polémica "Elefante" (2003)) ni tampoco la que más me haya emocionado de su obra, pero sin dudas es un producto absolutamente atendible y visionable, muy a tener en cuenta en estos tiempos que vivimos, donde los derechos civiles en muchas partes se han convertido solo en un vehículo de propaganda política de quienes gobiernan o son simplemente olvidados y hasta violados por quienes, se supone, deberían defenderlos.


Puntaje: 6/10

sábado, 14 de febrero de 2009

"GIGANTE" la última producción del cine uruguayo se presentó en el Festival de Berlín

Excelente recepción de público y crítica ha recibido la más reciente producción del cine nacional, ni más ni menos que en la edición numero 59 del Festival de Berlín, Alemania.

La película de Adrián Biniez, cineasta nacido en tierras argentinas pero radicado en Uruguay desde hace años, narra la obsesión de un modesto y obeso guardia de seguridad de supermercado que se enamora de una chica de mantenimiento del local, pero su timidez le impide acercarse a ella por lo que comienza a seguirla por donde puede, siempre buscando maneras de crear un primer contacto.

"Gigante" es una co-producción de Control Z Films conjuntamente con Alemania, Holanda y Argentina, filmada completamente en Montevideo y protagonizada por Horacio Camandulle y Leonor Svarcas.
Tras su exitoso pasaje por Berlín, tiene grandes posibilidades de estrenarse comercialmente en el resto de Europa así como de competir en otros festivales del viejo continente.
En Uruguay se estrenará oficialmente en mayo de este año.

viernes, 13 de febrero de 2009

Se vendría una nueva trilogía de Superman

La Warner ha dado a conocer su intención de iniciar una nueva trilogía que explote la imagen del Hombre de Acero. El proyecto les fue ofrecido a los hermanos Wachowski -nombre ligado para siempre con la saga "Matrix"- que trabajarían conjuntamente con James McTeigue, socio de la pareja que dirigiera hace unos años la interesante "V de Vendetta".

Bryan Singer, director de la última versión de Superman al cine, no formaría parte del nuevo proyecto y se desconoce si el final de su "Superman Returns" servirá o no de puntapíe inicial de la nueva trilogía.
Para mi gusto, Singer no hizo mal trabajo con su visión de Superman, pero siempre creí que fue un error que la planteara como una secuela casi directa de "Superman II" volviendo a traer a Lex Luthor en "plan venganza" con una amenaza que, en forma y contenido, tiene bastantes similitudes con la de la primera entrega de Richard Donner de 1978, lo que le quitaba bastante originalidad al asunto.

Si se confirma a los Wachowski como directores de la nueva saga y estos a su vez se cargan de inspiración -cosa que no hicieron con su aburrida revisión de "Meteoro"- es posible que terminemos viendo el mejor Superman de todos los tiempos. El tiempo dirá.

lunes, 9 de febrero de 2009

Crítica: "Operación Valquiria" de Bryan Singer

Las conspiraciones históricas han sido un rubro bastante frecuentado por guionistas y directores. Los resultados de cara al público, dependen tanto de si el desarrollo histórico del hecho a contar es por sí solo interesante, así como también de la manera en la que sea tratado y plasmado por el director. "Operación Valquiria" cubre bien ambos conceptos.

La operación del título fué en realidad uno de los muchísimos intentos de asesinato que sufrió Adolf Hitler durante su mandato.
El Coronel Stauffenberg (Tom Cruise) tras volver a Alemania malherido en combate, decide que es hora de poner fin a los planes del Tercer Reich y se une a un grupo de militares y políticos opositores a su mandato con quienes traza un osado plan para asesinarlo en su propio cuartel general.

Este atentado fué uno de los más espectaculares y trágicos de todos los que sufrió el líder de la Alemania nazi. Posiblemente sea por ello que ha sido llevado al cine numerosas veces durante las últimas décadas. Esta vez, Bryan Singer -un director ligado para siempre con la saga "X-Men"- tuvo el mérito de realizar la que, probablemente, sea la mejor y más fiel traslación del este hecho histórico a la pantalla. Dicha fidelidad implica que el espectador no se encotrará con un film bélico, como engañosamente sugiere la publicidad -la única secuencia de este tipo nace y muere en los primeros 10 minutos-. Tampoco verá un film de acción, salvo 5 minutos antes del final.
Lo que sí verá es una película básicamente de suspenso, brillantemente dialogada y actuada por su reparto, encabezado por un Tom Cruise al que se le nota cada vez más su intención de cambiar de registro; pocas veces lo he visto tan contenido y fuera de su condición de superestrella, cosa en la que imagino bastante tuvo que ver el trabajo de dirección de actores de Singer. La actuación de Kenneth Branagh, cuyo talento no necesita de dirección alguna, llega por momentos a opacar a la de buena parte del reparto, incluída la de Cruise. Lamentablemente, su labor se limita a pocos minutos. También hacen lo suyo, y muy bien, Bill Nighy, Tom Wilkinson y Eddie Izzard.

Uno de los principales problemas de este tipo de películas es que, al saberse de antemano cual será el final de todo -basta leer un libro de historia de secundaria para saber como acabó Hitler realmente-, la resolución de toda la trama no guarda muchas sorpresas y su impacto dependerá de que tanto se haya consustanciado el espectador con sus protagonistas. Por ello, hubiese sido bueno introspeccionar algo más en la vida familiar del protagonista y en los sentimientos y motivos más fuertes que movían al grupo de hombres que lo ayudaron a concretar su plan. Pero bueno, es casi imposible pedir tanto en solo 120 minutos.
Hay que admitir que Singer dirigió una película más que aceptable, con una estupenda reconstrucción histórica y una muy efectiva banda sonora a cargo del maestro John Ottman, cuya música suele ser el motor gestor de buena parte del suspenso del relato.

Para resumir, solo decir que por sus niveles de dramatismo y suspenso "Operación Valquiria" puede considerarse casi un "telefilm de lujo" que posiblemente no pase a la historia del cine, pero que se deja ver muy bien y dificilmente defraude a nadie.


Puntaje: 5/10

sábado, 7 de febrero de 2009

"The Changeling": Lejos de Clint Eastwood

El reciente estreno de "The Changeling" de Clint Eastwood me trajo a la mente el agradable recuerdo de otro film de mismo título en idioma inglés pero cuyas similitudes se quedan solo en sus títulos.

Muchos años antes de que Eastwood supiera siquiera que iba a convertirse en el destacado director que es hoy, se estrenó una película de género terrorifico que marcó un hito y que, muy probablemente, quienes la vimos en su época jamás olvidaremos. "The Changeling" o como se le conoció en casi todo el mundo de habla hispana, "Al final de la escalera", se trata de una película de terror canadiense de 1979 dirigida por Peter Medak, director regular en el género, protagonizada por un espléndido George C. Scott. La trama se centra en un hombre (Scott) que tras perder a su esposa e hija en un brutal accidente decide comprar una mansión bastante apartada de la urbe. Una serie de inexplicables sucesos en su nuevo hogar comienzan a poner nervioso al protagonista lo que lo lleva a indagar en la historia de esa enorme casa. Terminará por descubrir que una siniestra conspiración del pasado contra un antiguo habitante de la misma ha dejado su huella sobrenatural en ese lugar y ahora reclama justicia desde el más allá.

Algunas secuencias -la imagen del niño ahogado en la tina, la persecusión de la silla de rueda vacía, la pelota cayendo por la escalera- han pasado a la antologia del género terrorífico y han sido imitadas, generalmente sin éxito, infinidad de veces.
Personalmente creo se trata de una de las mejores películas sobre el tema de las casas embrujadas, si no la mejor, volviendo a demostrar que no se necesita apelar a los carísimos efectos especiales habituales en este tipo de producciones para generar miedo. Peter Medak como director hizo un excelente trabajo, a un nivel que lamentablemente no volvería a repetir en ningún trabajo posterior. La labor del recientemente desaparecido George C. Scott es sencillamente monumental, dándole a la historia toda la credibilidad y el dramatismo que necesita su personaje para que el espectador se sienta consustanciado con su aterradora situación.

El film fue rodado aprovechando una época dorada para el género terrorífico -finales de los años 70 y comienzos de los 80- en la que la paciencia del público comenzaba a aficionarse -o a desgastarse, según como sea vea- a los slashers como "Halloween", "Martes 13" o "Noche de Graduación" con argumentos donde la sangre y la tripa eran la moneda corriente. Posiblemente sea por ello que "The Changeling" de Medak resultase una bocanada de aire fresco y que goce hasta hoy en día de tan buen recuerdo a nivel del público aficionado o no al género. De hecho, la he visto de nuevo hace tan solo un par de años y a mi modesto juicio, el tiempo no la ha tratado para nada mal.

Puntaje: 7/10

"Silent Running" de Douglas Trumbull (1972): Cuando la ciencia ficción se volvió ecologica

Unos años antes de "Star Wars" y pocos después de "2001: Odisea del espacio", un especialista en efectos especiales de nombre Douglas Trumbull dirigió una peliculita que para muchos es un clásico dentro del género. Su nombre es "Silent Running" aunque en el mundo de habla hispana recibió el despistante título de "Naves misteriosas". En ella, un grupo de naves espaciales contienen jardines con las últimas especies vegetales de la Tierra en inmensos invernaderos con la esperanza que las mismas sobrevivan. De la noche a la mañana y sin demasiadas explicaciones, se ordena la destrucción de todos los jardines y el retorno a la Tierra de todas las naves. Los jardines son destruidos, menos uno, el mantenido por Lowell Freeman (Bruce Dern) cuya vida ha estado dedicada al cuidado de esos jardines espaciales y que al ver como son destruidos los de las otras naves decide tomar una decisión extrema; asesinar al resto de la tripulación de su nave y partir hacia lo más profundo de nuestro sistema solar acompañado solo de un trío de robots de mantenimiento a los que intentará humanizar a lo largo de su viaje.

De ritmo pausado, por no decir lento, siguió el estilo que el "2001" de Kubrick iniciara en 1968, ese que intentaba alejarse de la ciencia ficción más comercialoide habitualmente repleta de invasores espaciales y platillos voladores, tratando de mantenerse dentro de los parámetros de la ciencia ficción hard pero lográndolo solo de a ratos.
"Silent Running" también quiso innovar desde un concepto poco tratado por el cine de esa época: el de la ecología. La defensa que hace el protagonista de sus plantas puede resultar extrema, quizás tanto como la de sus superiores en destruir esos jardines que él tanto ama por motivos que uno intuye son absolutamente comerciales. Puedo entender que en su base ese concepto resultase valioso, y más para su época, por su intento de llamar a la reflexión sobre un tema que no era para nada recurrente en el cine de ese entonces. El problema es que la película en sí no pasa de ser lo que en el fondo un artesano de los efectos especiales como Trumbull pretendía que fuera: tan solo un experimento, mas centrado en su puesta en escena que en su argumento.
Muchas de las técnicas de filmación de miniaturas usadas en la película fueron precursoras de las que en pocos años más utilizaría George Lucas para su primera "Star Wars" y para casi toda la ciencia ficción cinematográfica posterior. Desde el terreno de lo experimental, podría decirse que "Silent Running" cumple su cometido, pero no va mucho más allá.

Su pretendida intención de mantenerse dentro de la ciencia ficción "dura" se pierde en cantidad de extravagancias más propias de la space-opera; ruido de viento en el espacio, compuertas abiertas en pleno vacío sin ningún efecto en el interior de la nave y hasta una secuencia del protagonista caminando casi en pleno espacio sin protección alguna. También el guión adolesce de cierta ingenuidad así como de cabos sueltos; nunca se explica el por qué las naves se encuentran orbitando Saturno y no la Tierra, ni por qué razón exacta el proyecto es terminado, ni el motivo por el que los jardines deban ser vaporizados con armas atómicas. Lo mismo sucede con ciertos comportamientos de Lowell; es poco creíble que con toda su experiencia en el campo de la botánica sea incapaz de percibir que al huir al espacio profundo y alejarse de nuestro Sol sus preciadas plantas comenzarán a marchitarse, cosa que para su sorpresa, efectivamente sucede en la parte final del relato. El guión también amaga a plasmar su situación de soledad y culpa por el asesinato de sus compañeros, pero son conceptos que jamás llegan a desarrollarse demasiado y pasan a no tener mucha trascendencia ni peso en la historia.

En cuanto al acompañamiento musical , colaboración de Joan Baez con el músico Peter Schickele, hay que decir que tiene sus buenos momentos, pero no siempre resulta la mejor opción para lo que la película quiere mostrar por lo que de a ratos se vuelve un poco densa y solo recupera su valor en la última secuencia y en los títulos finales.

"Silent Running" no era -ni es- un producto para cualquier público, mucho menos para el palomitero, ese que busca emociones fuertes típicas del cine mainstream, aquí inexistentes. Su verdadero valor lo encontrarán aquellos acérrimos fans de la ciencia ficción o quienes disfruten de ver un espectáculo visual con cierto contenido ecologista solapado que, al menos para su época, resultaba bastante fuera de lo común.